Gestionar emociones no es controlarlas (PRUEBA)

Reflexión sobre la verdadera naturaleza de la gestión emocional.

Solemos creer que “gestionar” emociones significa dominarlas o esconderlas. Pero gestionar es, más bien, aprender a reconocerlas y darles un lugar. La tristeza, la rabia o la ansiedad no son enemigas: son señales de lo que necesitamos. Al escucharlas sin reprimirlas, podemos tomar decisiones más conscientes. La gestión emocional no busca eliminar lo incómodo, sino aprender a convivir con ello, entendiendo que cada emoción nos trae un mensaje valioso.